La obsesión de Sukuna con el cuerpo de Megumi Fushiguro ha sido uno de los aspectos más intrigantes de Jujutsu Kaisen. Si bien puede parecer un simple deseo de poder, hay una razón más profunda detrás de su fijación.
Algunos fanáticos creen que el interés de Sukuna en Megumi está vinculado a su reconocimiento de la habilidad única de Megumi: la técnica Ten Shadows. Esta técnica, que permite la convocatoria de poderoso shikigami, tiene el potencial de desbloquear un nivel de poder que Sukuna podría usar para superar toda su fuerza.
Sukuna, como una de las maldiciones más poderosas que existen, busca constantemente formas de fortalecerse. Ya ha alcanzado un poder inmenso, pero su verdadero objetivo podría no ser simplemente recuperar su forma física. Al tomar el control del cuerpo de Megumi, Sukuna no solo obtendría acceso a la inmensa energía maldita que Megumi posee, sino también al potencial incomparable de su técnica de diez sombras. Este es un factor clave en el que Sukuna ve a Megumi como el recipiente perfecto.
El poder de la técnica de diez sombras


La técnica Ten Shadows de Megumi es única, lo que le permite convocar a múltiples poderosos shikigami manipulando diez técnicas malditas. Sin embargo, todo el potencial de esta habilidad aún no se ha desbloqueado por completo, y se insinúa que Megumi es capaz de hacer hazañas aún mayores con él. Sukuna, siendo un maestro de las técnicas malditas, probablemente ve este potencial sin explotar como una forma de superar sus límites anteriores. El potencial de la técnica podría ser una forma para que Sukuna aumente aún más su propio poder, por lo que es una parte crucial de su plan.
Lo que hace que la técnica Ten Shadows sea especialmente valiosa para Sukuna es su versatilidad y adaptabilidad. La capacidad de controlar múltiples shikigami a la vez ofrece una increíble versatilidad de combate y podría servir para mejorar las propias técnicas de Sukuna.
Al tomar el cuerpo de Megumi, Sukuna tendría acceso completo a estas habilidades, lo que le permitiría manipular las sombras y convocar criaturas que son más fuertes que incluso su actual Shikigami. Esto le daría una ventaja significativa, lo que potencialmente lo convirtió en una amenaza aún mayor para el mundo de Jujutsu Kaisen.
El deseo de Sukuna de poder inigualable


La búsqueda de Sukuna de Ultimate Power es un tema central en todo Jujutsu Kaisen. Aunque ha recuperado gran parte de su fuerza al habitar el cuerpo de Yuji Itadori, no está satisfecho. El verdadero deseo de Sukuna es recuperar su forma completa y superar a todos los demás seres, incluidas otras maldiciones. La técnica Ten Shadows podría ofrecerle un camino único para lograr ese objetivo. Al adquirir esta habilidad, Sukuna podría expandir su arsenal de técnicas, convirtiéndolo en una fuerza más formidable que nunca.
Además, Sukuna probablemente ve la capacidad de Megumi como un paso crucial para lograr una verdadera dominación. Con el poder de controlar múltiples shikigami, Sukuna podría abrumar a los oponentes de una manera que no ha podido hacer antes. Su deseo de poseer el cuerpo de Megumi, por lo tanto, no es solo una cuestión de conveniencia, sino que es un movimiento calculado para asegurarse de que nadie se interponga en su camino, incluso los hechiceros y las maldiciones más poderosos.
La clave para superar su pleno poder


La fijación de Sukuna en el cuerpo de Megumi proviene de su deseo de desbloquear el verdadero potencial de la técnica Ten Shadows. Megumi aún no se ha dado cuenta de la profundidad de su poder, pero Sukuna, con su vasto conocimiento y experiencia, ve la técnica como la clave final para superar sus límites.
La capacidad de controlar a estos poderosos shikigami permitiría a Sukuna dominar el mundo de las maldiciones y los hechiceros jujutsu por igual. Para Sukuna, tomar el cuerpo de Megumi no es solo una cuestión de supervivencia o control; Es una forma de ascender a un nivel de poder que lo haría imparable.